Highway to hell.

No sé de qué forma pueda explicar esto, quería hacerlo en forma de cuento pero últimamente no me inspiro tan fácil. Así mejor me voy directamente al grano.

Estos días de posada y preparativos navideños he estado al lado de algunos amigos que, realmente están igual de ociosos que yo. El sábado los acompañé a una posada de aquí por la colonia, platicamos, comimos, conocí a unas nuevas niñas de por aquí. Pero bueno, más noche los más jóvenes decidimos irnos a caminar por la manzana. Estaba con esta mi amiga, otro niño de 14 años que vivía en la casa donde ese día era la posada; yo le pregunté a mi amiga algo de la Universidad, pensando que íbamos a ir a la misma, pero ella me corrigió que no. Me explicó que ya no se iba a meter a la misma porque allí sólo le iban a forjar carácter -ella va a estudiar leyes. En cambio en la otra tenía oportunidades de ser abogada en algún otro país. Preguntándole al niño, dijo que él no iba a estudiar aquí en Guatemala. No me acuerdo a donde dijo que iba, pero pintó el lugar muy bonito.

Pero de repente a mi me entró una sensación de "Algo no está bien." La mayoría de gente que dice que aquí no vale la pena, que no hay trabajo, que no se puede ¡Que no, nada! Para dentro de un tiempo, las gente que dijeron que estas próximas generaciones podrían sacar a Guatemala adelante, serán pocos. Francamente yo tenía un pensamiento egoísta y similar, el de irme a otra parte. Pero un amigo me lo hizo ver como "No te has dado cuenta de esto." Me abrió los ojos y me percato de que la mayoría sólo quiere sacarse a sí mismos adelante, pero no dar un aporte a su tierra o tal vez hacer el cambio que realmente se necesita ahora. Y no digo que no esté bien hacer lo que uno quiera, ya que somos libres, pero ayudar no estaría de más.

Cuando al fin pude interrumpirlos en su plática, me animé a comentarles «¿Se dan cuenta de algo? Si nosotros somos el futuro de Guatemala... Guatemala está en la mismísima mierda. »